El español superó a todos los favoritos y le dejó la plata al checo Josef Dostal (3:32.145) y el bronce al ruso Roman Anoshkin (3:33.363). Se trata de la sexta medalla, cuarta de oro, para España en estos Juegos.
Cooper, un palista de padre británico y madre alemana formado y residente en Mallorca, se situó en la punta ya en los primeros metros de competición y pasó en segundo lugar en la meta parcial de 250 metros, pero cayó al quinto en las dos siguientes marcas.
Sin embargo, como hizo en la semifinal, consiguió recuperarse en el último cuarto de la prueba, remontó con un tremendo poderío y conquistó el oro.
En cuarto lugar entró el australiano Murray Stewart, con un tiempo de 3:33.741, y en quinto el portugués Fernando Pimenta, que fue tercero en el Mundial de este año y tercero en el europeo de 2014, con 3:35.349.
Los dos grandes favoritos para esta prueba, el danés René Holten, campeón mundial el año pasado, subcampeón europeo en 2014 y actual líder de la Copa del Mundo, y el alemán Max Hoff, que fue plata en Londres 2012 y campeón mundial en 2013 y 2014, se quedaron relegados desde el inicio de la carrera y llegaron en la sexta y la séptima posición, con 3:36.840 y 3:37.581 respectivamente. El octavo fue el eslovaco Peter Gelle, con 3:40.691.