Copa Confederaciones I España 0-0 Italia

España 0 - 0 Italia

España se mete en la final de la Copa Confederaciones tras eliminar a Italia en un agónico partido que se resolvió en la tanda de penaltis. Casillas volvió a ser el gran protagonista tras detener dos jugadas claras de gol en la primera parte del partido. Navas anotó el penalti definitivo y Ramos y Piqué, que también metieron sus lanzamientos desde los once metros, estuvieron perfectos. Los de Del Bosque no estuvieron bien, pero supieron comportarse como un equipo campeón y aguantaron las embestidas de Italia. España jugará su primera final en una Copa Confederaciones y lo hará contra Brasil, la anfitriona, la selección más laureada de la historia.

Javier Espelosín

Madrid | 28.06.2013 00:01

El Estadio Castelao en Fortaleza era el escenario para vivir uno de los mejores partidos de la Copa Confederaciones, pero en vez de Brasil, parecía que el partido se disputaba en Italia. España fue recibida con pitos y la afición se decantó por animar a Italia. Da igual la competición que se juegue, eran unas semifinales entre dos de las grandes selecciones europeas, y eso se palpaba en los jugadores y en la tensión que se respiraba en los minutos previos al partido.

España salió a por el partido desde el primer minuto y se notó en la presión del equipo en la misma frontal del área de Buffon. Pero Italia supo aguantar los primeros minutos para enseñar sus armas en cuanto tuvieran la primera ocasión, que llegó a los tres minutos de juego. Ambos conjuntos comenzaron enchufados y tratando de jugar sus bazas. España quería imponer su juego, pero Italia parecía tener bien aprendida la lección. Tenían claro cómo jugarle a La Roja. Prandelli, ordenó a sus jugadores presionar el saque de Casillas, no querían que España iniciara el juego desde atrás y su planteamiento inicial desconcertó a los de Del Bosque, que empezaron a verse superados por una sorprendente Italia.

Y ese desconcierto se plasmó en el campo. España no encontraba su sitio e Italia tuvo cuatro ocasiones  claras en apenas tres minutos. Primero fue Gilardino que remató rozando el palo un centro de Maggio. Un minuto después fue el propio Maggio quien remató de cabeza un pase de De Rossi que detuvo Casillas. Sin apenas respiro, Pirlo colgó una falta que De Rossi remató fuera y acto seguido fue Marchiso el que disparó a la izquierda de la portería de Iker.

España consiguió darle tranquilidad al encuentro después de unos primeros veinte minutos en el que Italia pudo adelantarse, pero sólo paró el empuje de los italianos. Había falta de ideas, de claridad, de movilidad. Se estaban perdiendo muchos balones y no se acababa ninguna jugada. Xavi, el motor del equipo, no apareció en los primeros cuarenta y cinco minutos e Iniesta parecía ser el único con la cabeza fría, pero él sólo no bastaba.

El partido iba a ratos. Después de un tiempo de mucha intensidad, pero sin apenas ocasiones, a los treinta y cinco, de nuevo Maggio remató de cabeza a bocajarro dentro del área pequeña, pero apareció Casillas, para salvar la ocasión más clara de la primera parte para los de Prandelli. Un minuto después Torres, que estuvo muy participativo todo el partido, dio el primer aviso a Italia. Controló de espaldas en el medio de la frontal del área, amagó para irse de Barzagli por la parte izquierda, y cruzó con la zurda a la derecha del palo de Buffon cuando ya se cantaba el primero.

Italia volvió a acercarse pero sin mayor peligro, y se llegó al descanso con un cero a cero que no sabía nada mal después de lo visto en la primera parte. España jugó los peores cuarenta y cinco minutos del campeonato, pero sobrevivió.

La segunda mitad arrancó con más tranquilidad y favoreció para que los de Del Bosque mejorasen su juego y equilibraran la balanza. La entrada de Navas por Silva le dio más claridad y más opciones al ataque. En el cincuenta y siete, el propio Navas disparó desde la frontal del área a las manos de Buffon sin mayor peligro. En los primeros minutos, ambos equipos salieron con miedo a encajar un gol que les pudiera dejar fuera de la final.

Iniesta intentó echarse el equipo a las espaldas y tras una jugada personal por la izquierda en la que dejó sentado a dos rivales, disparó a la izquierda de la portería italiana. Poco a poco, Italia volvió a coger la manija del partido y  seguía dando la sensación de encontrarse más cómoda en el terreno de juego y sus acercamientos, más por insistencia, corazón y por venganza, que por calidad, estaban metiendo el miedo a España.

A falta de diez minutos para el final del tiempo reglamentario, apenas hubo ocasiones claras para ninguno de los dos equipos y la prórroga parecía acercarse. Piqué estuvo a punto de evitarlo. El del Barça robó la pelota que le llegó a Torres, condujo por el carril del diez y en la frontal del área abrió a la derecha para que Navas de primeras, pusiera la pelota al punto de penalti para la llegada de Piqué, que disparó a las nuves. Y en el último suspiro, Xavi colgó una falta desde la izquierda y cuando parecía que Ramos iba a rematarla, despejó la zaga italiana y el árbitro dio por terminado los noventa minutos reglamentarios.

Las fuerzas escaseaban, la tensión por las nubes. El partido se había convertido en una batalla y parecía que el más fuerte se llevaría el partido. Nadie se rendía  y los dos equipos salieron a la prórroga en busca del gol que les diera un puesto en la final. Giaccherini disparó un misil que se estampó en el palo derecho de Casillas. A continuación fue Piqué por dos veces y Ramos, los que pudieron marcar en jugadas a balón parado. La más clara llegó en las botas de Jordi Alba que recibió un regalo de Iniesta desde la parte izquierda del área, pero la pelota no acabo de caer y el tiro se le fue por encima del marco de Buffon. De nuevo Piqué, al lanzamiento de una falta de Xavi desde el lado izquierdo, remató por encima de la portería. España se hizo con el mando del partido e Italia empezó a acusar el cansancio.

La segunda parte comenzó como la segunda, y una jugada entre Iniesta y Alba por la izquierda, se culminó con un pase del lateral a la frontal del área para que Mata rematara a la derecha de la portería italiana. A cinco minutos para el final la suerte se alió con Italia. Un disparo de Xavi desde la frontal del área sorprendió a Buffon, que se comió la pelota, pero pudo rechazar el balón lo suficiente para que se estrellara en el palo. De nuevo, en el último minuto, España pudo marcar a la contra, pero el partido finalizó y se fue a los penaltis.

Italia fue mejor en los noventa minutos, controló el tiempo de partido y Casillas salvó a España. En la prórroga España dominó y mereció llevarse la victoria, jugó mejor, tuvo llegada y ocasiones, pero no llegó el gol. Navas cambió a España, Iniesta volvió a ser el más activo y Casillas salvó a España. Ramos y Piqué, perfectos y Del Bosque volvió a hacer una cambio magistral al sacar a Javi Martínez en la prórroga de delantero.

La tanda de penaltis fue agónica nadie falló hasta que llegó el séptimo penalti, donde Bonucci no pudo aguantar la presión y disparó por encima de Casillas. Navas no falló y nos cita con Brasil en la gran final.