32 selecciones llegan a nuestro país con la intención de colgarse la medalla de oro. Se trata del primer Mundial con tantos equipos, lo que provoca el debut de combinados como el de Irán o Uzbekistán, y también del primer torneo de balonmano que se celebrará con cierta normalidad (público en las gradas) desde que el coronavirus llegase a nuestras vidas.
Las Guerreras debutan hoy en Torrevieja ante Argentina (20:30), un rival que no debería suponer problemas para las chicas de Jose Ignacio Prades, que también vivirá su estreno en un gran torneo tras sustituir hace apenas unos meses a Carlos Viver en el cargo de seleccionador. Las otras sedes del torneo son Llíria, Castellón y Granollers, donde se jugará la gran final el 19 de diciembre.
España, tras no cumplir con las expectativas en los últimos Juegos Olímpicos, llega a este Mundial en pleno proceso de regeneración, con varias jugadoras jóvenes llegando a un equipo que lideran veteranas como Carmen Martín o la portera Silvia Navarro. La mala suerte se ha cebado con la selección en forma de lesión a última hora: Lara González se pierde el torneo tras fracturarse ayer un dedo de la mano derecha. El objetivo de llegar a las medallas no será fácil, pero las Guerreras sueñan con repetir la plata lograda en 2019.
El camino en la fase de grupos es a priori sencillo. Tras medirse hoy a Argentina, esperan China (sábado, 20:30) y Austria (lunes, 20:30), dos rivales inferiores a las españolas. A partir de ahí, llegará lo complicado, con selecciones como Noruega, Rusia, Países Bajos o Francia como grandes favoritas. Pero las Guerreras prometen batalla.
