"No me gusta señalar a nadie, ni buscar culpables. Cuando las cosas no salen es cuando más unidos hay que estar. No hay que señalar a ningún compañero, hay que estar unidos, pasar página y pensar en el próximo partido", declaró.
"Sería absurdo no creer en tu propio entrenador. Tenemos que estar más unidos que nunca con nuestro presidente y nuestro técnico", agregó.
Para Ramos, la noche será "dura" para el madridismo, para todos los jugadores y para el entrenador. Además, reconoció que al Real Madrid no le salió nada porque perdió "muchísimos balones".
"No encontrábamos un estado cómodo ante un Barcelona que ha hecho un gran partido. Cuando el resultado es tan amplio, sobran palabras. El madridismo quiere hechos. No ha salido nada, no hemos incomodado al Barcelona, no les hemos presionado para incomodarles. Ellos han estado muy cómodos y han hecho un partido muy completo", señaló.
"Pocas palabras. El madridismo quiere hechos y toca levantar cabeza y pensar que es una noche jodida y difícil cuando pierdes así. Ahora es cuando tenemos que estar más unidos. Quedan seis meses y es pronto para hablar de fracasos. Estamos vivos en todas las competiciones. Estamos a seis puntos ante un rival que no suele fallar, pero hemos ganado ligas cuando estábamos por detrás", apuntó.
Respecto a la pitada del Bernabéu a su equipo y los gritos de dimisión a Florentino Pérez, recordó que en el estadio del Real Madrid ha silbado "a grandes jugadores" porque piden "justificaciones" cuando las cosas salen mal.
"A veces pitan a un jugador, al entrenador, al presidente y eso forma parte de nuestro estatus".
Por último, preguntado por si hay más afinidad en el vestuario con el anterior entrenador, Carlo Ancelotti, respondió que cuando la relación es de dos años, la afinidad y la amistad "es más cercana". Sin embargo, dejó claro que la relación con Benítez "es buena".