Los aficionados que esperaban al Barcelona en el hotel de concentración en Madrid recibieron a Gerard Piqué al grito de "se queda", ironizando con el mensaje que el mensaje azulgrana puso en las redes sociales cuando el brasileño Neymar aún no había anunciado su fichaje por el PSG.
El conjunto catalán aterrizó en la capital a las 12:35 de la mañana. Desde el aeropuerto, se dirigió directamente al hotel de concentración, el Eurostars Madrid Tower, donde esperaban unos 50 aficionados. Tanto los jugadores como el cuerpo técnico se bajaron del autobús y entraron en el hotel sin pararse con la afición. Eso sí, Leo Messi recibió el cariño y ánimo de los presentes, que agradeció con un saludo.
El Barcelona se encuentra en Madrid para disputar la vuelta de la Supercopa de España frente al Real Madrid en el Santiago Bernabéu. Los azulgranas perdieron en la ida en el Camp Nou con un marcador de 1-3. Por lo tanto, deben marcar al menos tres goles para hacerse con el título.