Un testarazo del argentino Lucas Boyé Elche en el primer remate a puerta del Elche en el estadio Santiago Bernabéu a tres minutos del descanso, adelantó a los de Frnacisco ante un Real Madrid errático en los últimos metros que incluso perdonó un penalti en el lanzamiento del francés Karim Benzema. El delantero cambió su lado habitual pero el balón se le marchó por encima del travesaño.
Hasta trece remates, cinco con buenas intervenciones de Edgar Badía, que impulsaron a un Elche que acertó en su única llegada a la portería de Thibaut Courtois. El guardameta de los franjiverdes mostró todo su repertorio de paradas.
Boyé puso en ventaja a su equipo tras el error en el lanzamiento de un penalti al brasileño Vinícius de Benzema, con el que finaliza la mejor racha racha de penas máximas marcadas consecutivas por el equipo blanco con 34.
En el segundo tiempo el Real Madrid ha entrado algo espeso sin la facilididad para crear ocasiones que habían tenido en el primer acto con un Elche bien pertrechado. De Burgos Bengoetxea ha visto un derribo sobra Hazard y ha señalado pena máxima. Sin embargo, ha acudido al monitor del VAR y ha rectificado su decisión. Las malas noticias continuaban para los blancos que en el minuto 57 perdía por lesión a Karim Benzemá. Era turno de Luka Jovic.
Ancelotti buscaba más ataque con la entrada de Rodrygo en lugar de Toni Kroos. La más clara hasta entonces llegó en el 70. Buena acción de Hazard y remate final de Vinicius que salía cerca del palo. La cuenta de remates ya era de 16 a 1 para el Real Madrid. Pero no tardaría en llegar el segundo remate del Elche.
Y capricho del destino, también iba a acabar en el fondo de la portería. Genial acción de Lucas Boyé que habilita a Pere Milla para cruzar el balón ante Courtois. No era el día de los blancos. En la siguiente acción Casemiro mandaba un cabezazo a la cruceta.
En el 80 el Var devolvió a los de la capital el penalti que les privó tras una mano de Pere Milla de las que este año no ofrecen duda. Luka Modric transformó la acción ante la ausencia de Benzemá y enganchaba al Real Madrid al encuentro. Verdú negaba una y otra vez los ataques del Real Madrid.
Y en el 91 se derribó la muralla ilicitana. Vinicius una vez más desequilibró. En línea de fondo crea una jugada casi de la nada. Sirve un centro perfecto que Militao remata de forma imperial para poner el empate.