El Real Madrid superó a la Juventus por 1-0 en un duelo de alto voltaje en el Hard Rock Stadium de Miami y se metió en los cuartos de final del Mundial de Clubes. En una noche marcada por el calor, la humedad y el empuje de 62.149 espectadores, el equipo de Xabi Alonso fue de menos a más y terminó imponiendo su calidad, liderado por un gran Fede Valverde, un gol decisivo de Gonzalo García y las intervenciones de Courtois cuando más se le necesitó.
El partido comenzó con una Juventus ambiciosa, presionando alto y aprovechando la falta de ritmo del Madrid. Kenan Yildiz y Kolo Muani estuvieron muy activos, generando peligro constante en la primera media hora. Courtois tuvo que intervenir en un par de ocasiones para mantener el empate, mientras la defensa blanca sufría para ajustarse al plan de Tudor. El Madrid, por su parte, buscaba a Vinicius y a Güler, que dejó detalles de enorme calidad, pero le costaba conectar líneas.
El cambio de sistema con Tchouaméni pasando al centro del campo dio más equilibrio al equipo blanco. Valverde se soltó, Arda comenzó a aparecer entre líneas y Bellingham rozó el gol antes del descanso, pero fue Di Gregorio quien empezó a escribir su noche mágica: primero con un paradón a Valverde en el 45’, luego sacando un disparo potente de Huijsen y evitando otro tanto de Bellingham.
Gonzalo, decisivo
La segunda parte fue un monólogo del Real Madrid. Tras varios avisos, llegó el gol que rompió el partido. Centro medido de Alexander-Arnold desde la derecha y cabezazo impecable de Gonzalo García por debajo del larguero para el 1-0. El canterano volvió a responder en un escenario grande, apareciendo donde siempre se le necesita. Fue su tercer gol del torneo, confirmando que su irrupción no es casualidad.
A partir de ahí, la Juventus intentó reaccionar con los cambios, pero el Madrid fue mejor. Valverde lo probó desde lejos en varias ocasiones, incluso con una chilena espectacular que Di Gregorio desvió en la parada del partido. El arquero italiano fue el gran sostén de su equipo, firmando hasta seis intervenciones de mérito ante Tchouaméni, Güler y Vinicius.
Mbappé, ya recuperado, tuvo minutos finales en los que se le notó falto de ritmo, pero participó con buenos movimientos. Modric y Fran García ayudaron a cerrar el duelo, y Courtois selló el pase con una gran parada a Conceiçao en el 56’.
El Real Madrid supo sufrir cuando tocó y dominar cuando encontró el ritmo. Xabi Alonso sigue afinando su plan y su equipo mostró personalidad y solidez para dar otro paso en su camino hacia el título. En cuartos de final, espera el ganador del Borussia Dortmund - Monterrey. El Madrid ya está entre los ocho mejores del mundo, y sigue creciendo. Siguiente objetivo, Dortmund o el Rayados de Sergio Ramos.