El conjunto azulgrana, que superó al Betis en semifinales por 2-0, con tantos de Ebrima y Fran Orduña, confirmó su superioridad en la final ante el cuadro sevillista, que había eliminado al Celta por 3-2.
Un doblete del capitán Raúl Expósito de cabeza y un magnífico disparo de Ebrima dieron el título al conjunto de Jordi Pérez y Pau Moral. En la lucha por el bronce, el Celta se impuso al Betis por 1-0 con otro gran gol de Bryan.