Tenía muy claro el Atlético de Madrid la importancia de ganar este partido y sumar tres puntos para asaltar la tercera plaza tras el empate de la Real Sociedad ante el Cádiz.
El partido comenzó con homenaje por parte del Metropolitano y el club a Simeone, que se convertía en el entrenador con más partidos en la historia del Atlético de Madrid superando nada menos que a Luis Aragonés. Los rojiblancos salieron mejor al partido y tuvieron alguna llegada en los primeros minutos, la más clara en las botas de Marcos Llorente, pero su disparo se marchó fuera.
El encuentro se le iba a poner de cara al Atlético pasado el minuto 20 con un doblete de Memphis en apenas tres minutos. El primero llegó tras una gran asistencia de Griezmann. El neerlandés se quedó solo ante Bono y batió al marroquí en el mano a mano para abrir el marcador. Poco después, recogió un balón en la frontal del área y la puso en la escuadra para el 0-2.
El Sevilla, muy débil, se iba a meter en el partido en la recta final de la primera parte con un gol de En-Nesyri. Acuña metió un balón al área para el desmarque de Gueye que puso el balón para que el marroquí rematara en el área pequeña y batiera a Jan Oblak.
Pero el gol iba a ser poco más que un espejismo, pues tras la reanudación Griezmann iba a poner de nuevo tierra de por medio con un zurdazo imparable para Bono.
Savic estuvo cerca de hacer el cuarto de cabeza en una jugada a balón parado y el Sevilla pudo volver a meterse en el partido tras un error en salida de la defensa del Atlético, pero el disparo de Suso se marchó alto.
Carrasco hizo el cuarto a falta de veinte minutos para el final después de un remate mordido de Pablo Barrios. El belga recibió el balón solo en el segundo palo y solo la tuvo que empujar. Morata firmó la manita unos minutos después tras aprovechar un gran pase de Griezmann. El madrileño falló en el mano a mano con Bono, pero él mismo recogió el rechace para empujarla a placer. En el tiempo de descuento, Morata volvió a mojar batiendo a Bono con un trallazo desde el interior del área para firmar el definitivo 6-1.
El Sevilla pudo maquillar el resultado desde el punto de penalti, pero Rakitic, que engañó a Oblak en el lanzamiento, estrelló la pelota en el poste. Pape Gueye vio la segunda amarilla tras una patada a destiempo a Mario Hermoso.
El Atlético de Madrid suma su octava jornada consecutiva sin perder y se hace con la tercera posición mientras que el Sevilla sigue en situación muy delicada. Los de Sampaoli se quedan un punto por encima de un descenso al que podría caer este domingo dependiendo de los resultados de Valladolid y Valencia.
