El Atlético de Madrid se impuso (0-2) este sábado al Elche en el Martínez Valero, en el encuentro correspondiente a la decimocuarta jornada de la Liga BBVA, en un choque donde el tempranero tanto del uruguayo José María Giménez, culminando una gran acción de estrategia, facilitó el triunfo colchonero.
El conjunto de Simeone consiguió su décima victoria liguera tras derrotar sin demasiados apuros a un Elche que seguirá una jornada más en zona de descenso. Con este triunfo, los rojiblancos consolidan la tercera posición a la espera de los resultados de Real Madrid y Barça, que le podrían acercar al liderato.
En un primera parte sin mucho brillo, el Atlético de Madrid se adelantó pronto en el marcador con un tanto marca de la casa. De nuevo en un saque de esquina, una buena triangulación entre Siqueira, Koke y Arda provocó la llegada del uruguayo Giménez, que controló recortando a Damián y fusiló la portería del Elche en el primer cuarto de hora (min.16).
El encuentro no tenía mucha fluidez en el juego por las continuas faltas de ambos conjuntos. Los ilicitanos, por debajo en el marcador, intentaron estirarse en busca del empate y casi lo consiguen poco antes del descanso. Fayçal le pegó desde lejos y sorprendió al meta Moyá, que despejó a córner y se golpeó contra el poste.
Tras la reanudación, el Atlético siguió controlando el partido cómodamente y pronto iba a sentenciar el partido en el 53. Un gran pase al espacio de Gabi fue definido a la perfección por el croata Mandzukic para anotar su sexto tanto en liga y hundir así al Elche en los puestos de descenso.
Los de Escribá intentaron recortar diferencias pero no consiguieron poner en problemas a una defensa que no echó de menos a los lesionados Ansaldi y Miranda. En el tramo final, Simeone dio descanso a Arda y Mandzukic pensando en el partido clave por el primer puesto del grupo de 'Champions' ante la Juventus.
Esta victoria permite al Atlético dejar atrás los malos datos que tenía en el Martínez Valero, donde había perdido en cuatro de las últimas seis visitas. Además, los rojiblancos también mejoran sus cifras a domicilio, ya que solo habían sumado tres victorias en ocho jornadas. El campeón comienza a carburar.