El Real Madrid es el primer finalista de esta edición de la Copa del Rey tras vencer al Atlético de Madrid también en el partido de vuelta de semifinales, esta vez por 0-2, y redondear un 0-5 en el global de la eliminatoria. Dos penaltis marcados por Cristiano Ronaldo en el primer cuarto de hora fueron suficientes para sentenciar y hacer utópica una remontada de los locales.
Con muchas rotaciones en el equipo, entre ellas la de Diego Costa por sanción, los de Diego Simeone saltaron al terreno de juego confiados en romper al menos la mala racha de resultados (veía de dos derrotas, ahora tres) que llevan sumando últimamente. Sin embargo, la confianza de los aficionados en el Vicente Calderón se vino abajo en dos jugadas, dos fogonazos inocentes que se tradujeron en penaltis.
Primero fue Javier Manquillo el que derribó a Cristiano Ronaldo, y después fue Emiliano Insúa el que entró a destiempo con Gareth Bale. En las dos ocasiones, el encargado de transformar los penaltis fue el '7' blanco (minutos 6 y 15) y en ambas de la misma manera: tiro ajustado al palo izquierdo al que Aranzubia no llega pese a adivinar la dirección del disparo.
El doblete del portugués desactivó completamente al Atlético y el partido dio paso a unos minutos de control total por parte del Real Madrid, que movía el balón con tranquilidad por el centro del campo sin tomar riesgos y dejando que pasaran los minutos. Entre ambos goles, los rojiblancos pudieron haber empatado con un potente disparo de Raúl García al poste izquierdo de Íker Casillas.
Con el paso de los minutos, los locales buscaron la reacción para, al menos, maquillar el resultado. Koke y Raúl García lo intentaron con dos disparos que no fueron entre los tres palos y Manquillo con un centro en el que el 'Cebolla' Rodríguez estaba fuera de juego. En el lado blanco, Cristiano siguió siendo de los más activos, buscando un nuevo gol en su noche.
El portugués fue protagonista en dos circunstancias más. Primero, por una amarilla que vio en un lance involuntario con Manquillo, que cayó mal y sufrió una fuerte torsión en el cuello. Se le ha diagnosticado un esguince cervical y fue trasladado a un centro hospitalario. Después, cuando los jugadores se retiraban a los vestuarios en el descanso, Ronaldo recibió un 'mecherazo' por parte de un espectador de la grada; la Policía y la seguridad privada del club atlético intentan identificar al autor de este incidente violento.
En la segunda parte, el Atlético siguió sin inquietar aunque puso intención con la entrada de Juanfran y Adrián, éste sustituyendo a un Diego desparecido en este partido. Por su parte, Carlo Ancelotti protegió a Sergio Ramos, que de haber visto una tarjeta se hubiera perdido la final.
Las jugadas más destacadas en la segunda mitad fueron un disparo de falta de Bale con el que pudo lucirse Aranzubia para evitar el 0-3, al igual que pudo hacer Casillas con una magnífica estirada en un disparo de Sosa, en una de las últimas jugadas del partido.
El Real Madrid zanja así unas semifinales en las que ha dominado de principio a fin ante un Atlético de Madrid superado en todas las facetas. Ya son 14 derbis seguidos sin triunfo rojiblanco en el Calderón, mientras que el equipo blanco disputará su 39ª final de Copa.