TIENE LA COMPRENSIÓN LECTORA DE UN UNIVERSITARIO

Un niño español de doce años pasa por universitario gracias al método Kumon

Se llama Iker y es un niño de 12 años como cualquier otro, pero a diferencia de los demás tiene la comprensión de un alumno de primero de Periodismo, gracias -dicen sus mentores- al método Kumon, del que se ha convertido en el primer alumno español que completa el máximo nivel de lectura.

ondacero.es

Madrid | 25.09.2016 14:54

Estudiante haciendo deberes
Estudiante haciendo deberes | Getty Images

El Kumon es un método japonés nacido hace medio siglo con el fin de que los niños y jóvenes -de entre dos y 20 años, aunque también es aplicable a adultos- desarrollen su capacidad intelectual por medio de las matemáticas y de la lectura.

Para ello, los estudiantes dedican quince minutos al día a realizar, de forma autónoma y autodidacta -aunque los profesores les guían-, una serie de ejercicios cuya dificultad va en aumento al subir de nivel, y en los que es indispensable recurrir a la concentración, el hábito de estudio y la confianza en uno mismo.

El objetivo final no es que los niños adquieran conocimientos concretos en matemáticas y lectura, eso solo son "beneficios colaterales", según ha explicado la profesora de Iker de Kumon, Sonia Castellano. El propósito principal, ha continuado, es que los alumnos desarrollen su máxima capacidad y se "empoderen" ante cualquier situación, académica o cotidiana.

Para ello, los estudiantes se enfrentan a cuestiones que están por encima de su nivel escolar y sobre las que no tienen conocimientos previos. Para encararlas deben recurrir e interpretar los conocimientos que ya tienen.

Solo así el alumno está obligado a usar todos los recursos que ya almacena, asegurando su desarrollo intelectual, ha explicado la profesora. De esta forma, los escolares pierden el miedo a lo desconocido y se sienten capaces de conseguir las cosas por sí solos, algo que es aplicable a la vida académica y a la cotidiana.

Los niños dejan de sentir vértigo, empiezan a ver los nuevos conocimientos como un reto y no se sienten tentados de pronunciar el tan manido "profe, eso no lo hemos visto en clase". En este sentido, Castellano asegura que estos estudiantes saben que pueden pasar por un momento de inseguridad, pero también son conscientes de que van a ser capaces de resolverlo.

Actualmente, hay cerca de cuatro millones de niños de todo el mundo los que desarrollen su capacidad intelectual por medio de este método, de los que 11.500 lo practican en España. Iker ha sido el primero que ha logrado completar el método en la modalidad de lectura, que llegó a España en julio y el menor concluyó en un mes, lo que supone un "mérito extra".

En la última etapa, el menor afrontó lecturas de clásicos como Rousseau o Aristóteles, desarrolló análisis de comentarios de texto y elaboró críticas en profundidad. La profesora ha ensalzado que los niños aprendan estas técnicas en un mundo en el que hay "exceso de información", y donde un buen nivel de lectura ayuda a filtrar y a saber de forma rápida y eficiente qué información "tiene buena base y es útil".

Castellano ha destacado que, en el caso de Iker, la evolución en la categoría de lectura fue muy rápida porque llevaba desde los ocho años practicando en matemáticas. Por eso, no tuvo que trabajar para lograr el pleno rendimiento y concentración, ni para abstraerse de todo para centrarse en la tarea -otro de los fines del método-.

Al mismo tiempo, el niño sigue trabajando en la modalidad de matemáticas, donde se encuentra a tres niveles del final, el "concluyente", que equivaldría su comprensión a la de un alumno de primero de Física. Por el momento, Iker tiene los conocimientos de un curso de nivel bachillerato avanzado, casi cuatro años por delante de su nivel escolar, ha matizado la docente.