FUERTE PITADA EN EL BERNABÉU POR CAMBIARLE

Isco, el dilema de Ancelotti que el madridismo no comprende

Genio y mago para los aficionados del Real Madrid y, en especial, para un Bernabéu que le adora y supuestamente también titular "innegociable" para Carlo Ancelotti "si está bien". Sin embargo, fue uno de los jugadores a los que el italiano sustituyó en el partido ante el Villarreal y cuando el equipo blanco debía buscar el gol para lograr la victoria.

ondacero.es

Madrid | 02.03.2015 12:57

Isco aplaude al marcharse del terreno de juego
Isco aplaude al marcharse del terreno de juego | Getty Images

"No hemos sumado un punto, hemos perdido dos". Este sentir expresado por Dani Carvajal tras empatar ante el Villarreal es el que, en general, dejó el partido en el Real Madrid. Los aficionados blancos que acudieron al estadio Santiago Bernabéu salieron con sensaciones contradictorias y nuevas dudas, entre ellas por qué Carlo Ancelotti sustituyó a Isco Alarcón en el minuto 77.

El malagueño se ha convertido en una extraña cuestión de conflicto entre el técnico italiano con el madridismo y consigo mismo. En la rueda de prensa antes del encuentro liguero, llegó a asegurar que el '23' "si está bien juega, es innegociable". "Es difícil decir qué posición es mejor para Isco porque ha jugado bien en todas las que le he puesto. Ha sorprendido como medio centro mostrando buena actitud defensiva y posicionamiento. Tenemos que utilizar sus características para el ataque más que para la defensa. Su actitud es muy positiva y es la clave de su mejoría", expresó de forma elogiosa.

Por eso, el Bernabéu se extrañó cuando en el minuto 77 del encuentro ante el Villarrreal, cuando el resultado era de 1-1 y el Real Madrid debía ir a por el gol de la victoria, Ancelotti decidía quitar del once al jugador que mejor representa la capacidad de sorpresa ante las defensas rivales. La reacción fue inmediata al ver la decisión del italiano para dar entrada a Asier Illarramendi: pitada sonora y general y gran enfado del madridismo.

El técnico italiano trató de justificar tras el partido ese cambio asegurando que buscaba "dar más equilibrio" al equipo. "Un entrenador está en el campo y hace un cambio porque piensa que es una cosa buena para el equipo. Si la afición después no lo entiende, lo siento", manifestó.

El madridismo juzgará ahora estas explicaciones. El Real Madrid llegó al partido del Villarreal tras una semana sin partidos y ante otra semana, la actual, en la que tampoco tiene compromiso de Champions. De esta forma, el estado físico de Isco era el óptimo, por lo que el cambio obedeció simplemente a cuestiones tácticas. Ahí es donde Ancelotti entra en contradicción, ya que, si tan desequilibrante considera al andaluz, parece poco lógico que decida prescindir de él cuando necesita un gol para certificar el triunfo. Ése es el pensamiento del Bernabéu y el gran debate que se ha instalado por estos días en el madridismo.