LIGA BBVA JORNADA 19 | DEPORTIVO 0-4 BARCELONA

Deportivo 0 - 4 Barcelona. Messi conduce la goleada del Barcelona

Cuando Messi quiere, el Barça lo hace todo más fácil. El argentino volvió a dejar ver su mejor versión sobre el césped de Riazor y él solo se bastó y se sobró para dar la victoria a los suyos por 0-4 ante un triste Deportivo. El 10 anotó tres de los tantos de su equipo en una exhibición de fútbol azulgrana antes de recibir la visita del Atlético en Copa.

Jorge Bautista

Madrid | 18.01.2015 20:50

Messi manda, o más bien mandó, en la victoria del Barça en Riazor. El argentino fue la estrella absoluta en el encuentro que enfrentó al Barça frente al Deportivo en Riazor y que acabó con 0-4 en el luminoso con, casualmente, tres tantos del astro albiceleste y uno en propia puerta de Sidney. Lo hizo todo, y su figura lideró a los azulgranas en el último partido de la primera vuelta para cerrarla con 44 puntos y para afrontar el importante encuentro frente al Atlético en Copa del Rey con la motivación que da una victoria. Una lograda jugando un gran fútbol.

Y es que cómo se nota cuando Messi está con ganas. Cómo se nota cuando el argentino está metido totalmente en un partido y cómo lo agradecen todos y cada uno de sus compañeros. Porque cuando él es él todo es más fácil. Todo deja de ser lento, previsible y vulnerable. Deja de ser complicado y se convierte en una tarea sencilla en la que él es el líder, el auténtico y único líder, que lleva a los que visten de azulgrana a la victoria.

En La Coruña estuvo, otra vez, igual de entonado que en el envite del Camp Nou ante el Atlético. En defensa, peleón, intenso y repleto de energía. En ataque, activo, incisivo y buscando siempre el uno contra uno, o el uno contra tres, para hacerse con el espacio él solito o para buscar a un compañero mejor colocado. Fueron suyos los dos goles con los que los culés se fueron con 0-2 al descanso, y fue en sus botas donde nacieron además ambas jugadas.

Messi se lo guisa, Messi se lo come
Porque Leo no se quedó cual cono en un lugar del campo. No esperó a que le llegara la bola para simplemente meterla en las redes. Leo bajó. Leó combinó. Y Leo marcó. El primero, tras aclarar desde el mediocampo las ideas del Barça y terminar llegando desde atrás para conectar el cuero con la testa. El segundo, igual. Fue él quien empezó todo y quien lo acabó con una sutil vaselina frente a Fabricio tras una acción con un par de rebotes.

Hizo justicia a lo que se estaba viendo en Riazor, pues salvo en contados minutos el Barcelona no sólo tenía la pelota sino que controlaba el partido. De nuevo con intensidad y con verticalidad, con los extremos tirados a banda y con el trío de arriba con movilidad total. Además, Rakitic daba fluidez al juego y el Depor, aunque intentó estirarse, vivía más metido bajo su portería para evitar lo que a posteriori terminó siendo inevitable.

Ni atacaban con peligro ni defendían con contundencia. Algunos incluso andaban cuando Messi encaraba a algún compañero de rayas azules y blancas. Tal fue la parsimonia que a buen seguro el 10 no recordará tantas comodidades como las que tuvo en su tercer gol. En el que supuso su 'hat trick' cuando ya en la segunda parte, y tras sacar en corto un corner, se fue perfilando claramente con su zurda para batir a Fabricio de un latigazo imparable. Deberes hechos a falta de 25 minutos y a rotar, que llega el Atleti al Camp Nou.

Rotaciones y a por el Atleti
Busquets, Iniesta y Neymar fuera. Y dentro Pedro, Rafinha y Bartra. Mientras tanto, a buscar el cuarto, a evitar relajaciones y a esperar sin perder tensión la llegada del minuto 90 y del final del duelo entre campeones de Liga. Cerca estuvo el 0-4, de nuevo gracias a Messi, pero al final llegó por medio de un jugador del Deportivo. Autogol con el trasero de Sidney y la afición del Depor que abandonaba Riazor a falta de diez minutos para la conclusión del segundo acto. Cómo han cambiado las cosas por La Coruña...